En temporada navideña me topé con esta publicación en redes sociales.
Mi pensamiento al respecto es el siguiente:
Querido padre/madre que pides que no se rompan ilusiones de los demás, voy a darte mi punto de vista:
A parte de hacer peticiones y volcar responsabilidades sobre los actos de los demás,
TAMBIÉN TIENES LA POSIBILIDAD DE QUE LES ENSEÑES A TUS HIJOS A CONFIAR EN TI MÁS QUE EN LOS DEMÁS Y DE CREER EN TUS PALABRAS SOBRE LAS DE LOS DEMÁS.... De ese modo, no tendrás que temer o preocuparte por lo que los demás hagan o digan, sino que vivirás con la paz de la confianza de tus hijos en tí sin que nada los haga tambalear ni que caigan en decepción, sin que la relación padre-hijo se vea alterada. TU AMOR POR ELLOS LO REFUERZA TODO. A NO SER QUE NO LES PUEDAS OFRECER TAL GARANTÍA, PORQUE NO ERES 100% VERAZ... (ES EL PROBLEMA DE LAS MENTIRAS, YA SEAN MENTIRIJILLAS O SUPER-MENTIRAS).
BUSCA TU PROPIA RESPONSABILIDAD Y NO DEPENDAS DE LOS DEMÁS, ES LO IDEAL.
NOTA ACLARATORIA (que siempre es necesaria dado a tanta diversidad en la viña...):
Mis hijos no van por ahí diciendo a los 4 vientos que Papá Noel y los Reyes son mentira o que no existen....
Pero tened por seguro que si otros les vienen diciendo "sus verdades" mis hijos responderán con "su verdad", con todo el derecho que tienen de hacerlo, y sobre todo, el DEBER de responder así.
CUESTIÓN DE PRINCIPIOS.
Comentarios
Publicar un comentario