Hora de compartir el café y "algo más" en "mi Azotea"...: CAMBIAR Y SER CAMBIADO Llevo algún tiempo viendo en redes una publicación que dice que la gente no cambia , que solo demuestran en algún momento lo que antes tenían oculto . Bueno, creo que eso es uno de los casos que se da en algunas personas (o muchas) pero no que sea algo absoluto para todo el mundo. El entorno, el contexto, las experiencias y diversos factores ejercen influencia más que suficiente en el ser humano como para obrar un cambio en él, haciendo que la persona de 75 años no sea idéntica en carácter, conducta y mentalidad que en los días de su juventud. Hay una nota triste en esto, y es que la línea en la que ocurre esto es negativa , normalmente se cambia a desconfiar más, sensibilizarse menos, no creer casi nada, amar lo justo.... En resumen: UN ENDURECIMIENTO DEL SER. Yo no soy como parezco, soy peor, bastante peor... ¡alto! ¡volved! no corráis... Tampoco es para tanto, llego hasta cierto...
Desde la azotea de mi bloque hay vistas muy corrientes, edificios corrientes de un barrio corriente; no es mía particular, pertenece a la comunidad, pero un café en la tarde sienta muy bien allí. Sin embargo, tengo una "azotea" (mi cabeza) que sí es personal e intransferible. Ahí comienza la contemplación y reflexión de unas vistas que superan con creces lo que hay delante de mis ojos... Ahí, con un cafe en una mano y la Biblia en la otra, me elevo en las meditaciones de las Glorias de mi Dios.